Tener un pequeño balcón no es excusa para no sacarle provecho. Puede ser un lugar lleno de encanto, donde desayunar o ver el atardecer mientras tomas un té. Ahora que se acerca el buen tiempo, nos apetece aún más estar al aire libre, así que… ¡manos a la obra!
Desayuno 5 estrellas para dos...
En primer lugar, puedes elegir una pequeña mesa y dos sillas, plegables, que te darán mucho juego, aún si tienes poco espacio. Además, ¡será el rinconcito perfecto para dos! Eso sí, elige siempre materiales naturales y nobles, como madera y/o metal. Nunca plástico.
En primer lugar, puedes elegir una pequeña mesa y dos sillas, plegables, que te darán mucho juego, aún si tienes poco espacio. Además, ¡será el rinconcito perfecto para dos! Eso sí, elige siempre materiales naturales y nobles, como madera y/o metal. Nunca plástico.
Acompáñalo de unos cojines y de un mantel de tela, de algodón orgánico, para que sea aún más acogedor. Los nuestros están confeccionados a mano, por mysummerdress, por lo que tuvimos la suerte de poder elegir la tela y adaptarla exactamente a las dimensiones de la mesa y sillas. Las telas elegidas se complementan entre sí, con fondo blanco y lunares de color, y viceversa.
Acompáñalo de unos cojines y de un mantel de tela, de algodón orgánico, para que sea aún más acogedor. Los nuestros están confeccionados a mano, por mysummerdress, por lo que tuvimos la suerte de poder elegir la tela y adaptarla exactamente a las dimensiones de la mesa y sillas. Las telas elegidas se complementan entre sí, con fondo blanco y lunares de color, y viceversa.
Un toque vegetal: verde que te quiero verde
Es muy importante que introduzcas algún elemento vegetal y para ello lo más sencillo son las macetas cerámicas de toda la vida. Puedes ceñirte a las de barro, o también a la cerámica blanca, que le da un toque más minimalista. En cualquier caso, al igual que con los muebles, nunca utilices macetas de plástico. Los materiales naturales nos hacen sentirnos en un entorno afín a la naturaleza y crean una paleta de colores en armonía. Además de ser la alternativa más sostenible.
Cultiva tu propio huerto
Un recurso muy interesante si tienes poco espacio, es agrupar las macetas formando un pequeño huerto vertical. En este caso hemos combinado la madera de un pequeño palet, reutilizado como estantería, con botes metálicos. Hemos utilizado maceteros de acero galvanizado y latas de conserva reutilizadas. Todo esto además a un coste cero.
Madera + metal = combinación ganadora
En este huerto puedes tener pequeñas plantas aromáticas para cocinar, que sean fáciles de cultivar. A nosotros nos funciona fenomenalmente la hierbabuena, la albahaca, el romero, el poleo y el perejil (son los que tenemos actualmente). Aunque en el momento de la foto, lo que teníamos plantado eran tomateras cherry, que también nos dieron unas cuantas alegrías…
En este huerto puedes tener pequeñas plantas aromáticas para cocinar, que sean fáciles de cultivar. A nosotros nos funciona fenomenalmente la hierbabuena, la albahaca, el romero, el poleo y el perejil (son los que tenemos actualmente). Aunque en el momento de la foto, lo que teníamos plantado eran tomateras cherry, que también nos dieron unas cuantas alegrías…
El mejor plan: cena de verano en el balcón
Y para las noches de verano, no hay nada mejor que cenar a la fresca, con la tenue luz de las velas…
Con un pequeño toque de velas, luces en guirnalda, farolillos, puedes transformar completamente y sin mucho esfuerzo tu balcón. Y parecerá un espacio completamente diferente al del día.
Si tienes cojines apilables, puedes improvisar un pequeño sofá, que no te ocupará espacio al día siguiente, pues es de quita y pon. Puedes complementarlo con una pequeña mesa de centro, reutilizando una caja de fruta pintada de blanco y una bonita baldosa cerámica. Todo ligero, improvisado y fácilmente transportable, para crear espacios interesantes al uso y disfrute.
Qué mejor plan, que ver una peli o tu serie favorita con el portátil, en este rinconcito tan acogedor, después de cenar, en una noche calurosa de verano. ¡No desperdicies el potencial de tu pequeño balcón!
Esperamos que estas ideas os hayan sido útiles y os hayan inspirado para crear vuestro propio oasis urbano, que os llene de pequeños-grandes momentos de felicidad. Porque la felicidad está en las pequeñas cosas… ¡y en los pequeños espacios bien aprovechados! 😉