¿Qué és la desmaterialización? Vivimos una época de máxima saturación material y de información. Es necesario, por tanto, un proceso de depuración y selección, para poder seguir adelante, de forma renovada y con nuestros objetivos reforzados.
Pero el concepto de “desmaterialización” va más allá. Pone el foco en las vivencias, no en lo material. No es una simple limpieza, un descarte indiscriminado. Se trata de obtener el máximo aprovechamiento de los recursos disponibles. Optimizar lo que tenemos a nuestro alcance. Un ¡hacer más con menos! Y qué mejor que llevarlo a cabo en nuestra vivienda. Es un proceso y, como tal, tiene su inicio, sus etapas y su desarrollo…
Aquí van las…
5 claves iniciales para desmaterializar tu vivienda
1. Depúrate de objetos innecesarios
No somos conscientes, pero en nuestra vida acumulamos y acumulamos objetos, que dejan de servirnos en nuestro día a día. Estos objetos nos roban espacio vital. Y lo más valioso en nuestra casa es el espacio. ¿Qué vale más, una pila de revistas viejas polvorientas que nos impiden el paso (y respirar correctamente), o el metro cuadrado de vivienda que ocupan, por el que nos hipotecamos de por vida?
En su lugar podría haber, por ejemplo, una bonita silla y su cojín, donde poder leer confortablemente al lado de la ventana. Cambia los objetos obsoletos por vivencias. La casa es para ser vivida, no un almacén. Libérate de trastos y llena tu casa de espacios útiles y acogedores.
"La casa es para ser vivida, no un almacén"
Hoy en día lo tenemos fácil, hay numerosas aplicaciones para vender lo que ya no necesitamos, así como ecoparques para dar una segunda vida y una salida responsable a nuestros excesos.
Te animo a que hagas un análisis a tu alrededor. ¿Qué objetos te están lastrando? Imagina el potencial de ese nuevo espacio vacío. Es un bonito e inspirador punto de partida, ¿no te parece?
Hoy en día lo tenemos fácil, hay numerosas aplicaciones para vender lo que ya no necesitamos, así como ecoparques para dar una segunda vida y una salida responsable a nuestros excesos.
Te animo a que hagas un análisis a tu alrededor. ¿Qué objetos te están lastrando? Imagina el potencial de ese nuevo espacio vacío. Es un bonito e inspirador punto de partida, ¿no te parece?
Una vez te has liberado de lo innecesario…
2. Ordena y clasifica
Las cosas ordenadas son más bonitas. Así de simple.
Pon en valor tus pertenencias. Si las colocas en un lugar de fácil acceso, práctico y clasificadas, automáticamente estás aumentando su valor estético. Piensa en aquellos objetos que más aprecies o utilices. ¿Les estás dando el espacio que merecen?
Primer ejemplo: algo que utilizas todos los días, la ropa. Un armario abarrotado nos roba la energía con solo mirarlo. Ese mismo armario, con la misma ropa bien colocada, es más apetecible, nos inspira e incluso hace que nuestra ropa sea más bonita. Esto puede parecer muy básico, pero es la técnica de marketing que utilizan todas las tiendas de ropa y las macrocadenas de decoración, para que compremos sin parar.
“Que no te engañen”, no necesitas más cosas para ser más feliz, ordena las que ya tienes y demuéstrate que tu armario puede ser tan apetecible como el mejor de los catálogos. Tú no eres menos.
Segundo ejemplo: tus objetos más apreciados. Rodéate de lo que amas. Si tu pasión es tocar la guitarra, intégrala en la decoración. Te hará sentir bien y dotará de personalidad a tu casa. Al tenerla en un lugar accesible, te animará a practicar más. Y no perderás 2 ó 3 preciosos minutos cada día al buscarla en su abarrotado escondite, ese tiempo lo puedes emplear en hacer lo que más te gusta, tocar la guitarra.
"Rodéate de lo que amas"
Prioriza, sé práctico y ordena. A la larga ganarás tiempo. Si eres capaz de ordenar cada rincón de tu casa, convertirás lo que antes eran trastos, en objetos funcionales y decorativos.
3. Reutiliza objetos
Una vez llegado a este punto de barrido general en tu casa, en el que ya has sido capaz de desprenderte de ciertas cosas, ya eres alguien más crítico contigo mismo y ves todo con otros ojos. Dale un nuevo uso a esos objetos que tenías olvidados y ocultos. Dándoles una segunda vida, estás liberando espacio de almacenaje y ahorrándote la necesidad de adquirir cosas nuevas. ¡Quizás te sorprenda descubrir que ya tenías algo que estabas a punto de comprar!
4. Cambia los muebles de lugar
Con el nuevo espacio obtenido, ahora puedes jugar, experimentar. La casa debe ser algo vivo, cambiante. Una estancia puede tener un ambiente completamente diferente sólo con cambiar los muebles de sitio. Sé crítico, piensa en cuáles son los recorridos dentro de tu casa y coloca los muebles de forma funcional. Los espacios serán más fluidos y menos estresantes. Con menos elementos, sacarás el máximo partido funcional de cada espacio.
5. Saca partido a la luz natural
No pongas obstáculos a la luz. ¡Las ventanas bien abiertas! Intenta que ningún mueble se interponga en su camino. Las estancias parecerán automáticamente más amplias. Cuanta más luz natural tengas, mejor. Un truco puede ser colocar los muebles más ligeros y permeables delante, así no harán de pantalla y dejarán libre el paso de la luz a través de la estancia.
En arquitectura, la luz es tan importante que se considera un elemento más con el que componer. Dale protagonismo y… ¡deja que la luz inmaterialice toda tu casa!
¡No esperes más! Desde hoy mismo puedes aplicar estas 5 claves para desmaterializar tu vivienda...
Estos consejos son el punto de partida. Consejos que todo el mundo puede poner en práctica en su casa, ¡desde ya! No conllevan ningún gasto económico, aunque para aplicarlos con rigor necesitarás invertir tiempo, esfuerzo emocional y cariño. Eso sí, los cambios serán sorprendentes, te lo garantizo. Y notarás una mejora en tu día a día desde el primer momento.
Anímate a probar y comparte con nosotros qué repercusión ha tenido llevar a la práctica cualquiera de estos sencillos consejos. También puedes enviarnos una foto de una estancia, espacio o rincón de tu casa que quieras recuperar y te daremos unos consejos. Estaremos encantados de asesorarte en tu proceso de “desmaterialización”. Porque desde vegarquitectura pensamos que los grandes cambios en tu hogar empiezan por un cambio de actitud.
¡Maravilloso! Me da pena mandar la foto con mi desorden, pero mandare avances… ¡GraciasMil!
¡Muchas gracias Silvia por tu comentario¡ Septiembre es un buen mes para los nuevos retos… Así que ánimo y no dudes en comunicarnos cualquier avance, será un placer 😉